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miércoles, 25 de octubre de 2023

Tejiendo comunidades

 " Tejiendo comunidades" es el lema con el que se conmemora el Día de las Bibliotecas de este año. Destaca el papel de las bibliotecas en las comunidades en las que desarrollan su labor, como un botiquín de emergencia donde acudir a sanar el alma, como dice Rosa Montero en el vídeo conmemorativo de este día. 

Cartel: Nuria Riaza

El cartel es un diseño de Nuria Riaza, quien ha bordado a mano gran parte de la ilustración, acorde al lema. 

Aprovechamos para recordar que texto y tejido tienen mucho en común, como ha expresado exquisitamente Irene Vallejo:

Mi madre me leía libros todas las noches, sentada en la orilla de mi cama. El lugar, la hora, los gestos y los silencios eran siempre los mismos: nuestra íntima liturgia. Mientras sus ojos buscaban la página donde la víspera abandonamos la lectura, la suave brisa del relato se llevaba todas las preocupaciones del día y los miedos intuidos de la noche. Aquel tiempo de lectura me parecía un paraíso pequeño y provisional –después he aprendido que todos los paraísos son así, humildes y transitorios.

Desde tiempos remotos las mujeres han contado historias, han cantado romances y enhebrado versos al amor de la hoguera. Mi madre desplegó ante mí el universo de las historias susurradas, y no por casualidad. A lo largo de los tiempos, han sido sobre todo las mujeres las encargadas de desovillar, en la noche, la memoria de los cuentos. Las tejedoras de relatos y retales. Durante siglos han devanado historias al mismo tiempo que hacían girar la rueca o manejaban la lanzadera del telar. Por eso textos y tejidos comparten tantas palabras: la trama del relato, el nudo del argumento, el hilo de una historia, el desenlace de la narración. Devanarse los sesos, bordar un discurso, hilar fino, urdir una intriga. Por eso los viejos mitos nos hablan de la tela de Penélope, de las túnicas de Nausicaa, de los bordados de Aracne, del hilo de Ariadna, de la hebra de la vida que hilaban las Moiras, del lienzo de los destinos que cosían las Nortas, del tapiz mágico de Sherezade.

Aunque ya no soy aquella niña, escribo para que no se acaben los cuentos.

Escribo porque no sé coser, ni hacer punto, nunca aprendí a bordar, pero me fascina la delicada urdimbre de las palabras. Cuento mis fantasías ovilladas con sueños y recuerdos. Me siento heredera de esas mujeres que desde siempre han tejido y destejido historias. Escribo para que no se rompa el viejo hilo de voz.

 

No temáis entrar a la biblioteca. La biblioteca pública y la biblioteca escolar propician momentos de encuentros y descubrimientos. 

En este sentido, estad muy atentos a las novedades que trae este curso la biblioteca escolar. Hoy mismo se ha anunciado en redes la puesta en marcha de un grupo de lectura. Y además, siguen el programa Poesía Para Llevar, los concursos literarios y el Taller de poesía. 


¡Os esperamos para crear comunidad en torno a la palabra y la lectura!


lunes, 13 de febrero de 2023

Cosas de la gramática


Libro dos. Paco, el Bajo
Si hubieran vivido siempre en el Cortijo quizá las cosas se hubieran producido de otra manera pero a Crespo, el Guarda Mayor, le gustaba adelantar a uno en la Raya de lo de Abendújar por si las moscas y a Paco, el Bajo, como quien dice, le tocó la china y no es que le incomodase por él, que a él, al fin y al cabo, lo mismo le daba un sitio que otro, pero sí por los muchachos, a ver, por la escuela, que con la Charito, la Niña Chica, tenían bastante y le decían la Niña Chica a la Charito aunque, en puridad, fuese la niña mayor, por los chiquilines, natural,
   madre, ¿por qué no habla la Charito?,
   ¿por que no se anda la Charito, madre?
   ¿por qué la Charito se ensucia las bragas?, preguntaban a cada paso, y ella, la Régula, o él, o los dos a coro, 
   pues porque es muy chica la Charito, 
a ver, por contestar algo, ¿qué otra cosa podían decirles?, pero Paco, el Bajo, aspiraba a que los muchachos se ilustrasen, que el Hachemita aseguraba en Cordovilla, que los muchachos podían salir de pobres con una pizca de conocimientos, e incluso la propia Señora Marquesa, con objeto de erradicar el analfabetismo del cortijo, hizo venir durante tres veranos consecutivos a dos señoritos de la ciudad para que, al terminar las faenas cotidianas, les juntasen a todos en el porche de la corralada, a los pastores, a los porqueros, a los apaleadores, a los muleros, a los gañanes y a los guardas, y allí, a la cruda luz del aladino, con los moscones y las polillas bordoneando alrededor, les enseñasen las letras y sus mil misteriosas combinaciones y los pastores, y los porqueros, y los apaleadores y los gañanes y los muleros, cuando les preguntaban, decían,
   La B con la A hace BA, y la C con la A hace ZA,
y entonces, los señoritos de la ciudad, el señorito Gabriel y el señorito Lucas, les corregían y les desvelaban las trampas, y les decían,
   pues no, la C con la A hace KA, y la C con la I hace CI y la C con la E hace CE y la C con la O hace KO,
y los porqueros y los pastores, y los muleros, y los gañanes y los guardas se decían entre sí desconcertados,
   también te tienen unas cosas, parece como que a los señoritos les gustase embromarnos,
 pero no osaban levantar la voz, hasta que una noche, Paco, el Bajo, se tomó dos copas, se encaró con el señorito alto, el de las entradas, el de su grupo, y ahuecando los orificios de su chata nariz (por donde, al decir del señorito Iván, los días que estaba de buen talante, se le veían los sesos), preguntó,
   señorito Lucas, y ¿a cuento de qué esos caprichos?
y el señorito Lucas rompió a reír y a reír con unas carcajadas rojas, incontroladas, y al fin, se calmó un poco, se limpió los ojos con el pañuelo y dijo,
   es la gramática, oye, el porqué pregúntaselo a los académicos,

viernes, 15 de abril de 2022

Día Mundial del Arte: la belleza frente al dolor y el sufrimiento

Desde 2019 se celebra el Día Mundial del Arte, una fecha que reivindica la importancia del arte y el pensamiento creativo en la evolución humana y en la resolución de los problemas que nos plantea el complejo mundo actual.


De la escritura a la lectura (ilustración de Anna Speshilova)

Quiero recordar a este propósito un texto que me gusta mucho llevar a clase sobre la importancia de la belleza en nuestras vidas y su capacidad transformadora:

"¡Y ahora escucha! Lo que acabo de hacer es el truco más viejo de la Humanidad frente al horror. La creatividad es justamente esto: un intento alquímico de transmutar el sufrimiento en belleza. El arte en general, y la literatura en particular, son armas poderosas contra el Mal y el Dolor. Las novelas no los vencen (son invencibles), pero nos consuelan del espanto. En primer lugar, porque nos unen al resto de los humanos: la literatura nos hace formar parte del todo y, en el todo, el dolor individual parece que duele un poco menos. Pero además el sortilegio funciona porque, cuando el sufrimiento nos quiebra el espinazo, el arte consigue convertir ese feo y sucio daño en algo bello. Narro y comparto una noche lacerante y al hacerlo arranco chispazos de luz a la negrura (al menos, a mí me sirve). Por eso Conrad escribió El corazón de las tinieblas: para exorcizar, para neutralizar su experiencia en el Congo, tan espantosa que casi le volvió loco.  Por eso Dickens creó a Oliver Twist y a David Copperfield: para poder soportar el sufrimiento de su propia infancia. Hay que hacer algo con todo eso para que no nos destruya, con ese fragor de desesperación, con el inacabable desperdicio, con la furiosa pena de vivir cuando la vida es cruel. Los humanos nos defendemos del dolor sin sentido adornándolo con la sensatez de la belleza. Aplastamos carbones con las manos desnudas y a veces conseguimos que parezcan diamantes".


domingo, 27 de marzo de 2022

Mujeres en guerra

La reciente visita de Gervasio Sánchez puso el foco de nuestras reflexiones en la violencia que sufren las mujeres y niñas en los conflictos bélicos. Es evidente el horror generalizado, pero la desigualdad se agrava para ellas especialmente, como explica la contraportada del folleto que nos regaló el fotoperiodista:

"Las guerras dejan a las mujeres en una situación muy vulnerable ante la pobreza y el acceso a los recursos económicos. Los servicios básicos de salud y atención materno infantil se desmorona, la violación es utilizada como arma y agresión entre contendientes y la violencia de género, la trata de seres humanos y el matrimonio infantil se exacerban durante el conflicto. Al mismo tiempo, casi la mitad de las personas desplazadas por la violencia en el mundo son mujeres y a menudo atraviesan mayores dificultades por motivo de género en estas situaciones".

El fotógrafo reflexionó sobre el impacto dramático a través del tiempo de los conflictos armados, que en ningún caso cierran las heridas cuando termina la guerra.

Con esta sugerencia tan cercana, traemos de nuevo a clase un texto periodístico de Alfonso Serna ("El País", 29/04/2002) que denuncia también a través de una imagen la trágica guerra de Afganistán y la dramática situación de las mujeres del Tercer Mundo. Aunque el artículo no es reciente, el impacto de las imágenes y la mirada compasiva de los lectores hacia la protagonista de las mismas puede rastrearse hasta nuestros días: "La muchacha afgana, una vida desvelada" (National Geographic, 26 de noviembre de 2021).

Steve McCurry



"Los ojos verdes de Sharbat Gula, muchacha afgana, son los cristales que transparentan su alma angustiada.

Estoy hablando, y el lector ya se habrá dado cuenta de la famosa fotografía que Steve McCurry, reportero de la revista National Geographic, tomó a una adolescente afgana en un campo de refugiados en Pakistán, el año 1984; y de la segunda foto que, diecisiete años después, volvió a hacer a quien ya no era una muchacha adolescente sino una mujer aún joven, pero con el alma arrasada por el dolor de la vida. 

A sus trece años, Sharbat Gula nos miraba con los ojos asombrados, quizás un poco fieros, de la adolescente nacida en las ásperas montañas de su alta tierra de Afganistán. La tez aún lozana de la muchacha-niña, sus rasgos todavía tiernos, no harían presagiar los dramas que llegarían con el tiempo. 

Tiene las pupilas muy cerradas, como defendiéndose, acaso, de la luz, lo que torna más verdes sus claros iris, que tanto impresionaron al fotógrafo. 

Diecisiete años después, Steve McCurry los ha vuelto a encontrar en las montañas de Tora Bora, en donde una segunda guerra dejó oír hace poco su mortal estruendo. Y ahí están los iris verdes que componen una mirada aún fiera, pero en la que se resume la historia de una mujer que, siendo niña, perdió a sus padres en un bombardeo, peregrinó en éxodo por las montañas más ariscas del mundo, bajó las nieves, sin abrigo, casi descalza, tiritando de frío; trabajó inhumanamente, sufrió, se casó en la adolescencia, tuvo cuatro hijos (y uno murió), vio la vida a través de una rejilla tupida, no sonrió a nadie que no fuera su marido, apenas habló, enfermó de asma; y pertenece a un pueblo en desgracia que, a lo largo de veintitrés años, ha perdido un millón y medio de seres y ha lanzado a todos los caminos del destierro a tres millones y medio de refugiados. 

Los ojos verdes de esta historia nos inspiran una inmensa piedad, pero lo tremendo es que no son, no serán, solamente los ojos de Sharbat Gula, muchacha afgana, sino los de millones de mujeres, con frecuencia casi niñas, que a lo largo del vasto y conturbado mundo de hoy, habrán visto, estarán viendo, los horrores de nuestro tiempo. No solo las mujeres, naturalmente, también los hombres; pero uno piensa que, sobre todo, en lo que hemos dado en llamar el Tercer Mundo, son las mujeres las más dolientes, las más vulnerables por el abandono, la discriminación, el desprecio, la ignorancia, las leyes absurdas, las costumbres bárbaras".

domingo, 20 de marzo de 2022

"Solo palabras", Manuel Vicent


"Entre el inagotable caudal de palabras que sale de la garganta de una persona corriente, me pregunto cuántas son necesarias, determinantes y comprometidas. Entre todas ellas están las palabras que cambian el curso de una vida, las que uno se arrepiente de haberlas pronunciado, las que se callan por miedo y se quedan quemándote la lengua. La mayoría de las palabras se las lleva el viento, pero las hay malditas que en medio de una disputa familiar o amorosa caen al suelo y ya no hay quien las levante. Las palabras crean un sendero y uno las sigue como un esclavo. ¿Cuándo fue la primera vez que dijiste no? Sin duda, ese fue un gran día. El no te libera, el sí te ata. Unos han venido a este mundo a hablar y otros solo a escuchar, este es el privilegio que distingue a los ricos de los pobres. La verdad no cambia, la diga el filósofo o el arriero, el creyente o el ateo, el juez o el reo, pero según con qué palabras venga adornada una misma verdad te llevará al cielo o al infierno. Las palabras más sólidas e inapelables son, a fin de cuentas, las que masculla entre dientes el sepulturero. Las primeras palabras que el niño oye de su madre quedan grabadas para siempre en alguna mucosa del cerebro. Son muy tiernas, con sabor a leche, pero han causado ríos de sangre solo por atacarlas o defenderlas. Todas las palabras que se ha llevado el viento forman una atmósfera alrededor del planeta que puede llegar a ser muy tóxica. La sabiduría consiste en aprender a respirarlas según su valor y naturaleza. Las hay venenosas, mortíferas como balas que utilizan los tiranos para sembrar la muerte, pero también están en el aire a disposición de cualquiera las palabras que usaron Homero, Virgilio y Horacio para enhebrar sus versos. Unas te salvan, otras te matan. No son más que un poco de aliento que en el mejor de los casos sirve para decir te amo, para decir me muero".

(Manuel Vicent - El País - 20-03-2022)


domingo, 30 de enero de 2022

Memoria y Holocausto


Cada año, en torno al 27 de enero, la UNESCO rinde tributo a la memoria de las víctimas del Holocausto y ratifica su compromiso de luchar contra el antisemitismo, el racismo y toda otra forma de intolerancia que pueda conducir a actos violentos contra determinados grupos  humanos. 

En estos días, también en clase reflexionamos sobre este genocidio, sobre cualquier genocidio, porque, como avisa el editorial que hemos llevado a clase, "la bestia continúa agazapada entre nosotros". 

"Cuando los más importantes líderes europeos se reúnan hoy en Oswiecim (localidad polaca a la que los alemanes llaman Auschwitz), para conmemorar el 60º aniversario de la liberación del campo de exterminio allí erigido por los nazis para aniquilar a judíos y a otros "pueblos inferiores", Europa y Occidente en general celebrarán un año más su acto de atrición. Pero hay que tratar de evitar que el mundo se considere en paz simplemente por el hecho de recordar el asesinato de más de seis millones de seres humanos, en lugar de combatir hasta la extenuación las causas que hicieron posible aquella y otras insanias colectivas.

Porque a la postre, y en contra de la aurora prometida tras la Segunda Guerra Mundial, los genocidios masivos se han seguido sucediendo ante la parálisis o lentitud de la comunidad internacional. Están cercanos los ejemplos lacerantes de Camboya, Ruanda, la antigua Yugoslavia o, ahora mismo, Sudán. Todo este horror acumulado nos recuerda que el fogonazo histórico de aquel exterminio masivo mantiene sus epígonos en un mundo que también se dice civilizado y que se considera a sí mismo en buena medida liberado del estigma de barbarie de los autores del Holocausto.

Asumiendo que la bestia continúa agazapada entre nosotros, la Asamblea General de la ONU acaba de conmemorar por primera vez el aniversario de Auschwitz con un homenaje a las víctimas de la solución final. Por su universalidad es el más significativo, pero sólo uno del rosario de actos que van a evocar hoy el inmenso horror perpetrado en el corazón de Europa.

Tal día como hoy de 1944, seis mil personas eran asesinadas en las cámaras de gas y hornos crematorios de Birkenau, uno de los campos de Auschwitz. Un horror que 60 años después aún alienta en países desarrollados en forma de movimientos filonazis.

España, por razones básicamente históricas y demográficas -el franquismo, la no beligerancia en la Segunda Guerra Mundial y la poca población judía en nuestro país-, ha vivido relativamente al margen de este hecho crucial, con las notables excepciones del trabajo de algunos de nuestros diplomáticos. Por eso cabe felicitarse de que se sume a la iniciativa educativa de la UE instaurando el Día de la Memoria del Holocausto, con el propósito, sobre todo, de que las generaciones más jóvenes tengan la oportunidad de conocer y reflexionar sobre una de las páginas más tenebrosas de la humanidad. El minuto de silencio previsto hoy en los centros escolares debería trasladar a los adultos del futuro el estruendo de que el genocidio nazi, cualquier genocidio, es incompatible con la dignidad humana".

("El País", 27/01/2005)

La reflexión suscitada por el editorial, intemporal y por tanto cercana, nos ha llevado a este álbum ilustrado que ha seleccionado estos días el equipo de Biblioteca para conmemorar el Día Internacional de la Paz y la No violencia. 

Se trata, en palabras de la editorial Algar, "de una alegoría de la fragilidad de la libertad y la vulnerabilidad de la democracia".

La historia, con muy poco texto, está inspirada en el poema sobre la persecución nazi,  falsamente atribuido a Bertol Bretch, que en realidad escribió el pastor luterano alemán Maratin Niemöller, y que reproducimos aquí:

«Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas,
guardé silencio,
ya que no era comunista,

Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio,
ya que no era socialdemócrata,

Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté,
ya que no era sindicalista,

Cuando vinieron a llevarse a los judíos,
no protesté,
ya que no era judío,

Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar».


domingo, 19 de diciembre de 2021

Día Internacional del Migrante

Ingrid Tusell

El texto que comentamos esta semana conecta con la realidad de los inmigrantes. La columna de Pepa Bueno fue publicada hace tiempo, pero tiene un hueco habitual en mis clases por su aportación positiva a la interpretación social que hacemos del fenómeno migratorio.  Coincide oportunamente con el Día Internacional del Migrante y el tema propuesto para 2021: "Aprovechar el potencial de la movilidad humana".


"Sin inmigrantes, España se pararía. Muchos padres deberían reducir su jornada o renunciar al trabajo para criar a la prole. O para atender a sus ancianos. Además, deberían incluir en su jornada laboral la limpieza del centro de trabajo. La fresa se pudriría en Huelva y el tomate en Almería sin manos que los recogieran. En el súper, nos serviríamos directamente del almacén, a falta de reponedores en las estanterías. Adiós al boom inmobiliario, esta vez de verdad, por falta de mano de obra. Imposible subir una bombona de butano a un tercero sin ascensor. En los bares, ni tostada ni café. Muchos tendrían que cerrar. Los ingresos de la Seguridad Social temblarían con ese español y medio que aportamos al mundo productivo cada pareja "de las de aquí de toda la vida"... Y así podríamos ir citando, una tras otra, las parcelas en las que marroquís, ecuatorianos, rumanos, bolivianos se han vuelto imprescindibles. La convivencia con los inmigrantes que han llegado a España buscando los empleos que nosotros no queremos o no podemos desempeñar nos ha aportado, además, otras cosas: palabras, colores, sabores, músicas, experiencias nuevas y sorprendentes.

Conviene no olvidar nada de esto ahora que, en el fragor de la campaña electoral, solo hablamos de la inmigración como problema. Conviene recordarlo cuando conozcamos a alguien que tiene una empleada a la que no le paga la Seguridad Social o contrata una reformilla sin factura para su cuarto de baño o alquila a precios astronómicos una vivienda a familia por habitación. Conviene recordar esos pisos atestados de gente cuando nos preguntemos por qué los inmigrantes invaden los parques los domingos. La inmigración plantea desafíos. La convivencia los plantea siempre. Mucho más cuando se ponen en común universos lejanos, que estimulan el miedo atávico al diferente. Sobre todo cuando se otean dificultades y los más frágiles económicamente se disputan los servicios. Cerrar los ojos a esta realidad es un error, pero arreglarlo solo con mano dura es imposible".

 

"El Periódico", 14 de febrero de 2008

martes, 27 de abril de 2021

Salvemos lo que nos salva


El "Manifiesto por la lectura" de Irene Vallejo es una declaración de amor a las palabras y a la lectura que nos sumerge en ellas, y, al hacerlo, nos refleja, nos revela, nos salva.

Estos días andamos inmersos en el proyecto "Salva un libro" y las palabras con las que cierra el manifiesto Irene Vallejo acompañan a la perfección nuestras motivaciones y objetivos al proponer curso tras curso esta actividad simbólica. 

Traigo a esta ventana un fragmento del epígrafe IX "Salvemos el milagro", una reflexión deliciosa, que destila sensibilidad y erudición, como todo el ensayo:




"Nunca como hoy, en nuestras modernas democracias, habían estado tan abiertas de par en par las puertas a la lectura. Los libros nacieron como un privilegio de sacerdotes, aristócratas, nobles. Durante cientos de años, estos cofres de sabiduría y de historia permanecieron guardados en los palacios, en los grandes conventos, en las mansiones más suntuosas, en los pisos principales de las casas nobles. Eran emblema de lujo y privilegio.

En un asombroso viaje de treinta siglos, hemos logrado que todos tengamos un pasaporte al conocimiento: la alfabetización y el libre acceso a la lectura. Hemos quitado cerrojos a los libros y les hemos calzado zapatos cómodos. Los hemos traído a la plaza pública, al ágora, donde nadie tiene negado el acceso. Esto no ha sucedido por arte de magia. Es la cosecha de años de educación y de transformaciones sociales. En escuelas, en institutos y en universidades. En editoriales que crean libros de bolsillo para todos los bolsillos. En las imprentas. En las librerías a pie de calle .En las bibliotecas de barrio, en las escuelas rurales. Desde las Misiones Pedagógicas a las ferias y fiestas donde las letras toman el sol. Desde el impulso público al minucioso entusiasmo de las empresas que nutren la cultura. Del tesón de incontables maestras anónimas a los dormitorios donde los niños cierran un ojo acunados por un cuento.

En estos días inciertos, cuando parece que los gritos se oyen más que los susurros, los libros siguen manteniendo vivo el diálogo silencioso de un par de ojos que escuchan la voz de unas hileras de letras. (…)

Lo sabemos bien, lo narran los cuentos populares: las historias y los libros cobijan en su interior un mágico hechizo de protección, una fortaleza inmune para los humanos. Detrás de lo que hemos llegado a ser laten las rebeldías de generaciones anteriores. (…)

Somos seres entretejidos de relatos, bordados con hilos de voces, de historia, de filosofía y de ciencia, de leyes y leyendas. Por eso, la lectura seguirá cuidándonos si cuidamos de ella. No puede desaparecer lo que nos salva. Los libros nos recuerdan, serenos y siempre dispuestos a desplegarse ante nuestros ojos, que la salud de las palabras enraíza en las editoriales, en las librerías, en los círculos de lecturas compartidas, en las bibliotecas, en las escuelas. Es allí donde imaginamos el futuro que nos une".

                                            IX- “Salvemos el milagro” (Manifiesto por la lectura, Irene Vallejo)

sábado, 13 de marzo de 2021

Voces/armas de mujer

Ana Jarque presenta la Charla-Debate: 
 "8 mujeres, 8 visiones del Mundo Rural"

En los momentos previos a la Charla-Debate del Día Internacional de la Mujer reflexionábamos un grupo de mujeres de la Comarca sobre el peso educacional que llevábamos a cuestas, cada una desde su ámbito y experiencia, tan diversos.  

Ancestralmente, las mujeres hemos sido educadas para no darnos a entender, para ser prudentes, calladas, sumisas,... De niñas nos educaron para no llamar la atención, lo que era sinónimo de buena educación. Con el paso de los años, ya mujeres adultas, hemos comprendido que, tanto bajar el tono, tanto ceder la palabra, tanto pasar desapercibidas, hemos quedado al margen de muchas oportunidades, fuera de la solución de problemas que nos afectaban, invisibilizadas. Cuántas mujeres, desde ese silencio heredado, muchas veces impuesto, se habrán sentido despojadas de sí mismas. Nuestra voz es nuestra esencia, define lo que somos y nos proyecta hacia nuestros sueños y deseos.

El día 8 de marzo, Irene Vallejo publicó esta columna desenfadada  y nos reímos con ella, en el encuentro previo a la mesa redonda organizado para conocernos, recordando cuántas veces hemos callado para evitar ser puestas en tela de juicio por la mirada, masculina o femenina, que censura a las mujeres que se exponen públicamente. 


"Cotorras", Irene Vallejo ("Heraldo de Aragón", 08/03/2021)



En ese momento entre risas, conjuramos los nervios, y  decidimos charlar amigablemente esa tarde,  dejando de lado la presión del directo, hermanándonos  en torno a la mesa con palabras que tejen memoria y retos, hilvanando con experiencia y paciencia una historia reconocible en los relatos orales de las mujeres que nos precedieron. En el imaginario, la silla en la puerta de nuestras abuelas y bisabuelas, quienes se reunían al caer la tarde en una conversación sin fin. Tejiendo, también nosotras, un diálogo que quedó abierto a más intervenciones, a más mujeres, a más hombres que hacen camino junto a nosotras. Abierto, como no podía ser de otra forma, a la vida. 

El pasado 8 de Marzo oímos ocho voces de la Comarca Bajo Aragón-Caspe/ Baix Aragó-Casp. Somos tierra de frontera, pero tendimos puentes de diálogo, hacia el pasado (la memoria puesta en las mujeres que abrieron camino) y hacia el futuro (reivindicaciones justas de un mundo rural lleno de dificultades y oportunidades a partes iguales), sin olvidar el presente, desde el que afrontamos los retos diarios, marcados este año por la COVID-19.

Irene Vallejo nos había invitado a rescatar la voz silenciada de mujeres:

"No olvidemos —agradecidas— esa genealogía valiente y parlanchina que rompió cerrojos y horadó ventanas. No olvidemos —lenguaraces— continuar esa larga cadena, seguir arrebatando palabras al silencio, hablar allí donde aún es preciso rescatar de todos los confinamientos la voz de las mujeres" 

("Deslenguadas", "Milenio",05/03/2021) 

Y dimos voz. No callamos. Los lemas de cada una nos precedieron en las redes de Facebook e Instagram, gracias al magnífico trabajo de difusión del "Baúl de Comunicación", Y algunos lemas llegaron hasta Cádiz, apoyando una bicicletada reivindicativa, por arte y magia de la ilusión de los familiares de alguna voz de la mesa.  Es la fuerza de las palabras... Unas palabras que luego se han multiplicado en prensa ,  en ondas y en la web  y que siguen vivas en la plataforma de youtube de "La Comarca Bajo Aragón Caspe/Bajo Aragó-Casp". Invitados estáis a escuchar y compartir. 



Aprovecho esta ventana para dar las gracias de nuevo a todos los que habéis hecho posible este encuentro con entusiasmo y compromiso. Y a Ana Jarque  y Susana Campos, especialmente, por invitarme a asumir este reto. 

 

sábado, 13 de febrero de 2021

"El amor en tiempos de covid", Julio Llamazares

 

"Amantes", René Magritte

Pese a que San Valentín no deja de ser una cursilada, su celebración mañana hace que muchos nos preguntemos sobre cómo ha cambiado la pandemia las relaciones amorosas, principalmente entre los más jóvenes. A esa edad en la que el amor lo es todo, o la búsqueda del amor, o su fabulación, tener que estar confinado, reprimir toda aproximación al otro, no poder abrazarse ni besarse sin afrontar un peligro cierto, imaginar detrás de la mascarilla, debe de ser un suplicio por más que te digan que es necesario para no poner en riesgo tu salud ni la de las personas a las que quieres. No hay argumento que soporte la represión del deseo y mucho menos la del amor. Esa pasión de la que tanto se ha escrito y de la que tan poco sabemos realmente.

Peste y amor, enfermedad y amor, han sido binomios demasiado comunes a lo largo de los siglos y que han nutrido muchas historias tanto en la literatura como en el teatro o el cine. Desde Tucídides a Albert Camus pasando por Shakespeare o Virginia Woolf (Orlando), la peste y el amor han ido de la mano tantas veces que a nadie debería sorprenderle que en los tiempos de covid que estamos viviendo estén sucediendo historias muy parecidas a la que García Márquez inmortalizó en El amor en los tiempos del cólera, alguna de las cuales aflorará tarde o temprano en forma de novela o de película para el recuerdo de un tiempo oscuro y lleno de incertidumbre, pero en el que la vida continúa como siempre, con todos los sentimientos y las pasiones a flor de piel y hasta extremados por la dificultad como aquel amor de Fermina Daza y Florentino Ariza que sobrevivió a todo, incluso a la pandemia y a la muerte. Y es que, como escribió Cottard, neurólogo estudioso de las pasiones, ser presa de una enfermedad pone a la persona a salvo de cualquier otra enfermedad.

Pero esto está muy bien como teoría. O como idealización poética, que es otra forma de pensamiento. En la práctica, en este momento, la realidad es que la dificultad para manifestar y expresar las pasiones y emociones, y no digo ya para realizarlas, con los confinamientos, los toques de queda, la desconfianza, la distancia social obligatoria y tantos impedimentos como vivimos por causa de la covid, ha transformado las relaciones, que tienen que formularse forzosamente de otra manera. Sobre las relaciones sociales se ha escrito mucho, pero sobre las personales poco. Y a mí se me ocurre que es tiempo de hacerlo ya, pues, si es verdad que la incertidumbre afecta a la economía y a la política, no es menos cierto que la soledad perturba a muchas personas de modo más acusado por la pandemia, de igual modo que a otras, los jóvenes sobre todo, la covid les ha robado la libertad para amar como se ha de hacer, esto es, sin pensar en otra cosa que en su amor. Algo que era sencillo hasta hace muy poco, pero que de repente se ha convertido en una aventura o en una tragedia, o en sendas cosas a la vez, y que deja en el aire un olor inconfundible, el olor penetrante de la novela de García Márquez que quien la leyó no olvida: “Era inevitable: el olor de las almendras amargas le recordaba siempre el destino de los amores contrariados”.

 

(Julio Llamazares, "El País", 13/02/2021)

martes, 17 de noviembre de 2020

"Tiempos altamente humanos", Víctor Juan

En junio de 1931, recién inaugurada la II República, ese tiempo que el historiador Manuel Tuñón deLara llamó la gran ilusión, Ramón Acín mostró en el Ateneo de Madrid algunas de sus obras. En el folleto de presentación de la exposición, Acín –militante anarco-sindicalista y profesor de Dibujo de la Escuela de Magisterio de Huesca--, escribió: “En estos tiempos altamente humanos importa ser grano de arena”.

Durante los últimos meses no he dejado de repetirme que vivimos tiempos altamente humanos que exigen nuevas respuestas porque los problemas que tenemos ante nosotros también son nuevos. Como maestros, nos preguntamos qué es lo que cada uno puede hacer en la escuela para que los niños y las familias estén lo mejor posible. En la mente y en el corazón de todos nosotros está la máxima de Freinet: “D´ abord les enfants”. Primero los niños. Tenemos la responsabilidad de acompañarlos, de decirles que haremos cuanto esté en nuestra mano para que todo termine bien, que nunca van a estar solos. No es necesario ocultar la evidencia que nos devuelve la realidad. Vivimos días extraordinariamente complicados, pero juntos podemos levantar una muralla que impida que el miedo y la desesperanza invadan nuestras vidas. Para esta tarea, todas las manos son necesarias. No será fácil, pero nos sostendremos unos a otros. Dosificaremos los esfuerzos, mantendremos la calma y administraremos las dosis de ilusión. Estamos atravesando un desierto por el que nadie había transitado nunca. No hay mapas ni hojas de ruta. Tenemos, eso sí, la luz de las estrellas y aunque es imposible saber a ciencia cierta si nos encontramos al principio, al final o a mitad de la travesía, una palabra, una mirada cálida, una sonrisa cómplice o un pequeño gesto de cariño son un oasis en el que detenerse para recuperar el aliento.

En estos tiempos altamente humanos nos necesitamos para aprender a vivir en la incertidumbre. Buscaremos una luz para orientarnos en esta tormenta, aunque sea tan tenue como la que alumbra, en las noches de verano, el camino de las luciérnagas.

 

(Víctor Juan, “Heraldo de Aragón”, sección “Heraldo Escolar”, 4/11/2020)

Este texto tan inspirador, de Víctor Juan, profesor, escritor y director del Museo Pedagógico de Aragón,  nos ha servido de pretexto para ejercitar la pregunta 2 de comentario de textos según la prueba EvAU de Zaragoza. 

1.     Resuma en tres líneas el tema debatido en el texto y la opinión manifestada por el autor al respecto. (1 punto)

 

2.     ¿Qué quiere decir el autor cuando habla de que “estamos atravesando un desierto”? (1 punto)

 

3.     Comentario lingüístico dirigido: ¿Cuál es la intención comunicativa del emisor? Relaciónela con el género textual utilizado y sus características lingüísticas más importantes.   (3 p.)


 

lunes, 2 de noviembre de 2020

Preparando la parte de Literatura EvAU (Zaragoza): POESÍA

 

Tree 222- Toni Demuro


 PROGRAMA

 

TEMA 1. LA POESÍA

 1.1. Antonio Machado: los grandes temaspoéticos. Ver en el blog.

 1.2. La evolución poética de Juan Ramón Jiménez: en busca de la «poesía pura»

 1.3. A ELEGIR POR EL ALUMNO EN LA PRUEBA:

 a. La Generación del 27: cohesión grupal ynómina de autores. Ver en el blog

 b. La «poética» de la Generación del 27:entre tradición y vanguardia. Ver en el blog

1.4. Trayectoria poética de Federico GarcíaLorca: del neopopularismo al surrealismo. 

Ver en el blog

1.5. A ELEGIR POR EL ALUMNO EN LA PRUEBA:

 a. De la poesía existencial y social (Celaya, Hierro y Blas de Otero) al «Grupo poético de los 50».  

Ver en el blog

 b. La renovación poética: de los «Novísimos» a la «Poesía de la experiencia»


PREGUNTAS DE LECTURA

 

FEDERICO GARCÍA LORCA, ROMANCERO GITANO. La imagen del pueblo gitano.- Los personajes protagonistas.- Los temas trágicos.- Los símbolos.- Las técnicas narrativas y el estilo.

1. La imagen del pueblo gitano. - Guion de trabajo. -Wilkimpace

2.  Los personajes protagonistas.  Guion de trabajo-Wilkimpace

3. Los temas trágicos.  Guion de trabajo-Wilkimpace

4. Los símbolos.  Guion de trabajo-Wilkimpace

5. Las técnicas narrativas y el estilo.  Guion de trabajo-Wilkimpace


DIRECTRICES PARA LAS PREGUNTAS SOBRE LAS LECTURAS OBLIGATORIAS 

-Las preguntas se plantean como un control de lectura.

-Las cuestiones sobre cada lectura no son temas teóricos, sino propuestas de análisis del  texto.

-Se propondrá un texto extraído de la lectura como punto de partida para la exposición.

-En todo caso, y con independencia de la formulación de la pregunta, el alumno deberá  argumentar o ejemplificar sus ideas con el texto propuesto.

-La falta de referencia explícita al texto propuesto será penalizada.



En el blog tenéis dos propuestas de comentario redactado con solución

También podéis consultar un modelo de respuesta de las preguntas asociadas a un mismo fragmento. 

Igualmente, en la Wikimpace tenéis propuestas de desarrollo de la pregunta anexa:

''Romancero gitano'' (1928): Texto 1 y pregunta anexa (La imagen del pueblo gitano).
''Romancero gitano'' (1928): Texto 2 y pregunta anexa (Los símbolos)
''Romancero gitano'' (1928): Texto 3 y pregunta anexa (Los temas trágicos)
''Romancero gitano'' (1928): Texto 4 y pregunta anexa (La imagen del pueblo gitano).
''Romancero gitano'' (1928): Texto 5 y pregunta anexa (Las técnicas narrativas y el estilo).
''Romancero gitano'' (1928): Texto 6 y pregunta anexa (Los temas trágicos).
''Romancero gitano'' (1928): Texto 7 y pregunta anexa (Los personajes protagonistas).
''Romancero gitano'' (1928): Texto 8 y pregunta anexa (Los personajes protagonistas).


Romancero gitano: La antología completa puede leerse en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.  Apoyamos el comentario en aula con la guía de Planeta Lector.  Apoya la estructura con estos esquemas:



Para profundizar en esta obra, consulta el Estudio crítico del Romancero gitano,  realizado por la profesora de Lengua castellana y Literatura María José Casorrán Marín.