Víctor Juan en el IES "Mar de Aragón" de Caspe junto a los miembros del CECBAC |
“La memoria es la hija de la historia y hermana del corazón" (Forges)
Víctor Juan presentó en Caspe Crónicas de la vieja pizarra,
invitado por el CECBAC. Previamente, por la mañana, tuvo un encuentro con los
alumnos de 2º de Bachillerato en torno a la figura de Ramón Acín.
Presentación en el salón de actos del IES "Mar de Aragón" |
El autor rememoró la historia de Ramón Acín como si de un cuento se tratase. Acercó la historia con una profunda humanidad, demostrando que detrás de cada persona hay experiencias comunes y sentimientos cercanos.
"No te defraudaremos. Tus hijas Katia y Sol verán en cualquiera de nosotros un pedazo tuyo".
Parafraseando un artículo de Víctor Juan, la vida de Ramón Acín es “una vida que ayuda a entender muchas vidas”. Víctor Juan nos ha acercado una historia conmovedora y humana, emocionante en sí.
"Recordar es una victoria contra el olvido": Con este lema hemos querido recuperar los nombres de los maestros incluidos por Víctor Juan en sus Crónicas de la vieja pizarra, a través de las pajaritas /pajaricas de Ramón Acín.Víctor Juan visitó nuestro centro en 2014 para comentar con los alumnos de 4º ESO su novela Aquellos días de luz y palabras, un regalo que realizó a la ciudad de Caspe y a una generación que se crió por las calles de este pueblo en la década de los 70.
En ese momento conocimos su faceta de escritor.
Además de la novela mencionada, es autor de Por escribir sus nombres (2007), Marta
(2010) y Las manos de Julia (2012). El autor anunció su nueva novela para mayo, bajo el sello de la editorial Sibirana. Así mismo, ha publicado varios relatos, algunos de ellos
dedicados a la figura de la maestra
María Sánchez Arbós, una de las “mujeres de su vida”, junto a Palmira Plà (que
protagoniza la primera novela, Por escribir sus nombres): “Alma, alma, María” y
“Muerde la soledad”(I Premio en el IX Certamen de Relato corto Ciudad de Caspe). El último relato,
publicado en enero, “La caja de música”,
remite a Ramón Acín.
Además, fruto de su actividad frenética en twiter, tiene un libro delicioso de aforismos o victorjuanadas, como él las llama, Vademécum.
Además, fruto de su actividad frenética en twiter, tiene un libro delicioso de aforismos o victorjuanadas, como él las llama, Vademécum.
En este nuevo encuentro hemos descubierto su faceta docente y de investigador.
Víctor Juan dice que hace más de 50 años que entró por primera vez en la escuela de la Balsa de la mano de su madre y no ha salido de ella, pues, desde entonces lleva más de 30 años “dictando dictados”. Ha sido maestro por diferentes pueblos y en la actualidad es profesor universitario en la
Facultad de Ciencias Humanas y de la Educación de la Universidad de Zaragoza en Huesca.
Una faceta muy importante de Víctor Juan es la investigación:
Es Director
del Museo Pedagógico de Aragón, un lugar dedicado a recuperar la historia de
la educación en Aragón, que ha publicado materiales muy interesantes (algunos se exponen en el vestíbulo) y también un lugar para
recuperar la emoción del pasado a través de los
objetos que reúne.
Parte de su labor de investigación, toda una
vida, la ha volcado en numerosos artículos en revistas especializadas, como "Rolde", de la que fue director. En Heraldo de Aragón publica habitualmente
entrevistas a profesores (van 27) y en la sección “De escuelas & maestros”
, sus columnas relacionadas con educación (lleva ya 75).
Crónicas de la vieja pizarra constituye una selección de 66 columnas publicadas desde octubre de 2013 hasta junio de 2017, si bien es fruto de esta labor docente de investigación y recuperación de la memoria que ha transcurrido durante más de 30 años. En estos artículos repasa aquellos hitos que supusieron una renovación de la educación del primer tercio de siglo sin
precedentes: La Institución Libre de Enseñanza, las Misiones Pedagógicas, la imprenta Freinet, la
pedagogía Montessori,…Así mismo, se recuperan los nombres de tantos y tantos maestros que introdujeron metodologías innovadoras: en las aulas, utilizaban la
experimentación y los métodos participativos de aprendizaje, trabajaban al aire
libre, hacían excursiones y fomentaban la educación física, de alumnos y de
alumnas.
La guerra civil y la larga dictadura posterior
fueron especialmente represivas con la figura del maestro. Maestros que creían
en el poder transformador de la educación, la cultura y la escuela fueron
represaliados, asesinados, depurados, exiliados,… y finalmente olvidados.
Esta obra restituye la memoria como un acto de compromiso ético. Víctor Juan ha constituido en propósito de vida la recuperación de la memoria desde todos los ámbitos en los que participa (como docente, investigador, escritor, ciudadano...). Víctor Juan es un activista de la palabra, convoca las palabras para transformar el mundo en un lugar más justo.
“La necesidad de contar surge del deseo humano de que se conserven las historias que el olvido y la muerte condenan a la desaparición"
(Luis García Montero: “El tiempo no es una mercancía”, 18/02/18)
En este blog puedes consultar varias entradas sobre Crónicas de la vieja pizarra (Ed. Doce Robles):
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