Al olmo viejo, hendido por el rayo
y en su mitad podrido,
con las lluvias de abril y el sol de mayo
algunas hojas verdes le han salido.
¡El olmo centenario en la colina
que lame el Duero! Un musgo amarillento
le mancha la corteza blanquecina
al tronco carcomido y polvoriento.
No será, cual los álamos cantores
que guardan el camino y la ribera,
habitado de pardos ruiseñores.
Ejército de hormigas en hilera
va trepando por él, y en sus entrañas
urden sus telas grises las arañas.
Antes que te derribe, olmo del Duero,
con su hacha el leñador, y el carpintero
te convierta en melena de campana,
lanza de carro o yugo de carreta;
antes que rojo en el hogar, mañana,
ardas de alguna mísera caseta,
al borde de un camino;
antes que te descuaje un torbellino
y tronche el soplo de las sierras blancas;
antes que el río hasta la mar te empuje
por valles y barrancas,
olmo, quiero anotar en mi cartera
la gracia de tu rama verdecida.
Mi corazón espera
también, hacia la luz y hacia la vida,
otro milagro de la primavera.
Marcos ha elegido este poema y lo ve de esta manera, a la luz de lo que estamos viviendo:
"He
elegido este poema, porque creo que simboliza muy bien el paso del tiempo,
gracias a que se refiere a un olmo seco. Hace una alusión a la vida humana,
pasando por su etapa joven y a medida que pasa el tiempo deteriorándose, hasta
que otros más jóvenes van dando paso.
Yo creo que el paso
del tiempo, es un tema que siempre está presente en la literatura, en mayor o
menor medida. Si lees este poema en estas semanas malas que estamos
sufriendo por todo el mundo, haces el símil que cada persona es un olmo
diferente, es decir, que cada persona somos diferentes. Por ejemplo, si la
persona es joven y fuerte, podrá superar el coronavirus (olmo no muy viejo y
con esperanza de vida con partes verdes rebrotando), sin embargo, la gente
mayor que está en una mala situación tiene menos posibilidades de superarlo
(olmo viejo, carcomido, y con enfermedad, que, aunque le aparezcan algunas
mejoras sabe que no vivirá). También no nos damos cuenta, pero el paso del
tiempo en esta enfermedad ha pasado por muchos desapercibido. Parece que en
China el confinamiento empezó hace un mes, pero ya llevan tres meses, y casi no
nos hemos dado cuenta. Si hubiera leído este poema hace medio año, de nada de
esto me hubiera dado cuenta, pero al leerlo ahora me doy cuenta, por eso me
impactó tanto y me gustó tanto cuando lo leí"
En este enlace puedes ver su videopoema.